Mistica, Marketing, Fotografía. Estos pueden ser considerados los tres pilares del éxito en redes sociales. En una época donde vivir en redes sociales se volvió una necesidad indispensable para cualquier negocio o comercio que quiera subsistir la cada vez mayor competencia, las hamburguesas no podían quedar atrás.
La cultura del Food Porn ha sido un punto considerable de crecimiento para todo aquel que haya sabido usarlo. Lo podemos ver en Instagram y últimamente en TikTok, donde no es raro encontrarte recetas hamburgueseras con más de un millón de reproducciones en su haber.
Es que la gente come con los ojos y es por eso el trabajo de los foodies provocar hambre. Por eso, es bastante fácil ver como recetas que estaban olvidadas en el tiempo, ahora han renacido en popularidad gracias a la puesta en valor gracias a las redes sociales (más o menos como está pasando con Even Flow de Pearl Jam en estos días).
Hamburguesas virales
Miremos por ejemplo la receta de Simón publicada en nuestro Instagram. Pese a no ser la mejor de las recetas hamburgueseras de nuestro canal, la explicación al detalle del proceso de elaboración garpa un montón. Haciendo que supere las sesenta mil reproducciones y la barrera de los 6000 me gustas en Instagram.
Miremos también la Mac And Cheese Burger de FatKitchen, de quien ya compartimos otras recetas anteriormente. Casi cuatro millones de reproducciones y más de 300.000 corazones en TikTok hablan sobre un buen ejemplo de contenido viral.
Y pese a que se sale de la norma, está hamburguesa populariza un ingrediente que a primer vista no tiene nada que ver pero que dio los suficientes resultados como para que Kevin Bacon Fast Good la incluyera en su menú.
Influencers que la rompen
Otro claro ejemplo de esto es George Motz. Su divulgación hamburguesera no solo lo llevó a recorrer todo Estados Únidos mostrando y probando hamburguesas. Sino que también, gracias a la nueva era digital pudo entablar una relación con influencers del rubro que le tenían un respecto casi idolátrico, pero que cuando lo conocieron en persona se dieron cuenta de algo fundamental: era otro ser igual que ellos con la misma pasión que las hamburguesas.
A ver. Creo que a esta altura puedo considerarme que de marketing (y de hamburguesas) algo se. Y es por eso que debo decir que no hay marketing que valga si tu producto no es lo suficientemente bueno. Porque parte de ese marketing es meterse en la cabeza del consumidor y hacer una huella lo suficientemente profunda como para que nuestra marca quede boyando entre nuestros pensamientos.
Hamburgueserías en la movida social
Es por eso que no sorprende cuando vemos que las hamburgueserías que mayor popularidad manejan en redes sociales, están sin dudas en el top de calidad que nos ofrece la ciudad.
Salvo contadas excepciones como puede ser la joyita infravalorada de Carlo’s Burger, las mejores hamburguesas suelen tener una buena cantidad de seguidores en sus redes sociales. Sobre todo en Instagram, donde podes sacar el máximo potencial a una buena fotografía con gestión e identidad de marca.
Y es que hoy más que nunca queda en claro que con lo primero que se come es con los ojos. Por eso es ya una necesidad que tu red social predilecta para vender sea un fiel reflejo de la calidad de tu producto.
Hoy en día la hamburguesería argentina que más seguidores tiene es The Food Truck Store. Con sus 136.000 seguidores le gana por el amplio margen de 25.000 seguidores a su competidora más cercana: The Burger Company.
Ambas hamburgueserías, a mi parecer, no son las mejores de la ciudad. Sin dudas que entran en un top, pero no son la mejor hamburguesa de Buenos Aires ni de nuestro TOP 10. Lo cual deja ver que no siempre lo mejor sea lo que más seguidores tenga, sino que las redes también nos dan resultados basados en la constancia, el esfuerzo y la capacidad del administrador de generar engagement.
Como conclusión, la más básica de todas. ¿Querés saber que comer? Nosotros tenemos la respuesta. Argentina Burger es tu sello de confianza, porque amamos las hamburguesas y porque somos lo suficientemente histericos como para buscarle el pelo al huevo. Entra, pasa, sentate cómodo y ponete a leer mientras te da hambre, así ya sabes que es lo que no falla.
