Si se habla de salsas dentro de la gastronomía argentina, hay dos elementos cruciales que no pueden faltar: la salsa criolla y el chimichurri.
Más viejas que los primeros registros que existen de ellas, estas salsas son una compañía importante en los asados argentinos a lo largo y a lo ancho del país. Hecho con ingredientes en su mayoría autóctonos de la zona, estas salsas aportan sabores fuertes y característicos de la cocina argentina. Pero, ¿cómo se preparan estas salsas? Lo mejor es que, por sus ingredientes, pueden replicarse en casi cualquier parte del mundo para darle un toque característico a las carnes.
Chimichurri
Cuenta una vieja anécdota que el nombre de esta salsa es el resultado de la cruza entre ingleses y gauchos argentinos. Dice la historia que cuando los ingleses probaron la salsa quedaron fascinados con su sabor único y que cuando deseaban más le decían a los gauchos ‘give me curry, give me curry’.
Para hacer chimichurri se necesitan varios ingredientes. El principal es el perejil. Además, se necesita orégano, ajo y si querés agregarle un toque de picante podés ponerle ají rojo. Además, si va con tu paladar, podés agregarle cebollines o cebolla de verdeo. Se pican finamente todos los ingredientes seleccionados y se le agrega aceite (preferentemente de oliva) y vinagre (preferentemente de vino tinto) en menor proporción. Se le agrega un poco de jugo de limón, se lo salpimienta a gusto y ¡listo para disfrutar!
Tip: es conveniente preparar el chimichurri un día antes de comerlo, para que todos los sabores se asienten y el chimichurri tenga mucho más gustito.
Salsa Criolla
Más texturosa que su antecesora, la salsa criolla tiene como principal elemento a destacar su mezcla de colores y sabores producto de ingredientes completamente frescos. La salsa criolla es una salsa ideal para acompañar todo tipo de carnes, ya sean a la plancha, asadas o al horno.
Para preparar la salsa criolla se necesitan tomates, cebollas y morrones. Se corta la cebolla, los tomates peritas y los morrones en pequeños cubitos. También se le puede agregar cebolla de verdeo o cebollín dependiendo del gusto del consumidor. A la mezcla de ingredientes frescos se le suma aceite de oliva y vinagre (por cada una de aceite, media de vinagre), se lo salpimienta a gusto y ¡lista!
Tip: usá morrones rojos, verdes y amarillos para que tu salsa sea lo más colorida posible. Además, al igual que el chimichurri, es preferible prepararlo un día antes.
Para una experiencia argentina sin igual, ¡el chimichurri y la salsa criolla van con las achuras!
