El Pan: 11/20
El pan kaiser, en contraste con los panes de hamburguesa convencionales, se revela como una elección más firme y compacta. Dado su tamaño reducido no logra cubrir completamente todos los ingredientes. Sin embargo esta peculiaridad no resulta en un desarme del sándwich. La firmeza del pan se muestra eficaz, manteniendo intacta la estructura del Sándwich de Lomo Napolitano.
El sabor del pan kaiser añade una nota neutra a cada bocado. Aunque este toque no destaca demasiado en el conjunto de sabores, su presencia es notable. Es interesante notar que este sabor se mezcla con la naturaleza salada del lomo y el queso, aportando una armonía en lugar de dominar la experiencia gastronómica.
Los Toppings: 4/10
En cuanto a los toppings, el Sándwich de Lomo Napolitano destaca por su generosa rodaja de tomate. Esta adición no solo aporta color y frescura visual al conjunto, sino que también desempeña un papel crucial en la experiencia gustativa.
La jugosidad del tomate se libera con cada mordisco, proporcionando una textura refrescante que contrasta con la firmeza del lomo y la consistencia del pan kaiser. Además, el sabor del tomate complementa de manera sublime el toque salado del lomo y la intensidad del queso cheddar. Esta combinación crea un equilibrio armonioso entre los elementos salados y frescos, elevando la experiencia del Sándwich de Lomo Napolitano a un nivel superior.
Salsas y Aderezos: 1/10
En un giro inesperado, el Sándwich de Lomo Napolitano en McDonald’s elige la simplicidad al no incorporar ningún aderezo en su composición. A diferencia de otros platillos que a menudo dependen de salsas llamativas, este sándwich confía en los sabores naturales de sus ingredientes principales.
La ausencia de aderezos permite que los sabores del lomo, el queso cheddar y la jugosa rodaja de tomate se destaquen por sí mismos. Cada elemento tiene la oportunidad de brillar sin ser eclipsado por salsas más complejas. Esta elección de mantenerlo sin aderezo resalta la calidad de los ingredientes, enfocándose en la esencia de cada componente.
El Queso: 10/20
La elección de McDonald’s de emplear queso cheddar en fetas como co-protagonista del Sándwich de Lomo Napolitano es acertada, añadiendo una capa adicional de sabor y textura. La cantidad de queso es moderada, ajustándose de manera proporcional al tamaño del sándwich.
Sin embargo, se debe señalar un aspecto menos favorable: las puntas del queso que sobresalen del sándwich presentaban sequedad. Esta pequeña inconsistencia podría haber afectado la calidad del queso en esas áreas específicas, privando al conjunto de la jugosidad y suavidad que se esperaría del queso cheddar. Es posible que esta limitación en la frescura del queso haya sido un pequeño inconveniente en la experiencia general.
A pesar de este detalle, el queso cheddar cumple su papel al agregar una capa adicional de sabor salado y cremosidad al Sándwich de Lomo Napolitano. La elección de queso en fetas aporta una dimensión apetitosa a cada bocado, aunque la consistencia uniforme en todas las partes del queso sería deseable para una experiencia completamente satisfactoria.
La Carne: 8/20
En una interesante desviación del camino tradicional, el Sándwich de Lomo Napolitano en McDonald’s opta por sustituir el medallón de carne por generosas fetas de lomo. Esta elección distintiva agrega un giro inesperado al clásico sándwich, ofreciendo una alternativa que se destaca visualmente por sobresalir más allá de los límites del pan.
Las fetas de lomo no solo proporcionan una presentación llamativa, sino que también introducen un sabor más refinado y una textura diferente. Sin embargo, es crucial destacar que, al igual que con el queso, las partes del lomo que sobresalen del pan presentaban sequedad. Esta pequeña limitación podría haber afectado la jugosidad de esas áreas específicas de la carne, lo que podría considerarse como una consideración a mejorar.
El Sabor: 11/20
En términos de sabor, el Sándwich de Lomo Napolitano se destaca por la prominencia de dos ingredientes clave: el lomo y el cheddar. Con sus perfiles gustativos naturalmente salados, estos elementos conforman la columna vertebral del sabor, añadiendo una nota intensa y sabrosa a cada bocado.
Sin embargo, la inclusión estratégica del tomate y el pan desempeña un papel esencial en equilibrar esta intensidad. La jugosidad y frescura del tomate actúan como un contrapunto refrescante, rebajando el sabor salado y aportando un toque de acidez. Este equilibrio es esencial para evitar que el conjunto resulte abrumadoramente salado.
Por otro lado, el pan, a pesar de su ligero toque salado, actúa como un elemento neutral que une todos los sabores. Su firmeza proporciona una base sólida para la explosión de sabores, contribuyendo a la experiencia general del sándwich.